Mientras bajo y subo
escaleras en esta tarea diaria que me autoimpongo para no gangrenarme, escucho
el programa “Volver para ser otros”, una mirada sosegada de Iñaki
Gabilondo y varios expertos de diferentes disciplinas sobre lo que estamos viviendo
y lo que está por venir. Y otra vez “Todo encaja”. Ocurre que Gabilondo hace su
introducción al programa y menciona la novela de Luis Vélez de Guevara “El
diablo Cojuelo” (año 1641). Mi cerebro se alborota al escuchar la cita pues
es uno de los libros de cuyos enredos me hablaba mi padre, creo que incluso antes
de que yo aprendiera a leer. Las historietas de un diablillo tan listo como
travieso, que mostraba a un estudiante los secretos de los hogares madrileños “destapando”
tejados, me fascinaba entonces y nunca
ha dejado de hacerlo; no son pocas las
ocasiones en las que me sorprendo evocando aquellas aventuras, imaginado que
observo desde el aire las vidas privadas de mi ciudad.
Tejados y vidas |
Intuyo muchas familias extrañándose
con dolor, sabiéndose lejos, y no
precisamente en kilómetros sino en hechos coyunturales. Contemplo creadores
dando lo mejor de sí, descubriendo que el mundo virtual acoge y celebra su ingenio.
Admiro a quienes mantienen la cabeza fría y analizan y extrapolan datos, distantes
e impasibles ante las especulaciones. Me pregunto también por la situación de
personas cercanas cuyos trabajos están paralizados ¿Cómo estarán mi peluquera, mi fisioterapeuta,
la chica de Rodilla que me pone el café cada día? Y pienso también en personas
ajenas; hace un rato, tras una extraña asociación de ideas, se me ha ocurrido
pensar en las prostitutas. Sin clientes, ¿las estarán abandonando sus chulos,
las mafias traficantes de mujeres? ¿Qué estará pasando con los millones de
personas que viven al día, que sobreviven al día en economías sin subsidios ni piedad?
El Diablo Cojuelo y su estudiante
miran pero no actúan. Nosotros también miramos porque muchos tejados ahora se
han levantado y no solo para que miremos, también, seguramente, para que
interactuemos.
Hoy en España: 78.796 contagiados, 6.528 muertos, 14.709 curados